Bueno, empecé el colegio. Después de una semana y
media de esperar, al final empece.
La idea de nervios y miedo queda corta para esta
situación. Reflexionemos: un colegio gigante, enorme, donde no conozco a nadie,
todos hablan un idioma totalmente distinto y rápidamente y con una gran
exigencia académica. Bueno, eso (en el futuro me va a servir para desdramatizar
las cosas probablemente)
Mi pequeño colegio |
Empecé el jueves. Como esta lloviendo mucho ya que se
espera que el sábado llegue el tifón a Gunma, me llevaron en auto. Fue la
primera vez que ví un embotellamiento japonés, donde lo raro es que no se
insultan. Simplemente escuchan la radio y no se quejan (igualito a la Argentina ). Después de
15 minutos de retraso (mi presión estaba por las nubes), llegamos. Me presente
en la sala de profesores, hablando en japonés y me llevaron al aula. Me senté
en el lugar que me asignaron y todos me sonreían.
Inmediatamente casi, todos se pararon y se iban. Como
extranjero que soy, seguí a la manada. Iban hacia la super capilla que tiene la
escuela. Imaginen lo raro que es para un católico hispanoparlantes estar en un
“culto protestante” por 30 minutos todo en japonés- Fue una experiencia que
difícilmente olvide y que voy a tener que vivir todos los días. Lo más
sorprendente es que hay una canción que tiene su traducción al castellano. Fíjense
en el link que sigue:
Fue muy loco escuchar una canción que me resulte
conocida!
Después volví a clase y los chicos tenían examen, así
que tuve que exiliarme en otro aula. Ni bien terminó, volví y me tuve que
presentar. Algunos luego se acercaron a charlar. No es como en Argentina que
cada vez que viene un extranjero le hacemos una fiesta de bienvenida, pero
fueron muy cordiales!!
Hoy fue el segundo día, y el primer día que tenía que
ir solo. A mitad de camino, empezó a llover mucho. Me puse el piloto y seguí.
Choque con dos postes porque no podía maniobrar la bicicleta por la lluvia. Eso
no fue lo peor, sino que seguí de largo la estación dos kilómetros. Es decir,
hice 4 kilómetros
demás.
Me dí cuenta que estaba perdido y peor, llegando
tarde. Creo que ahí realmente me sentí un extranjero en Japón. Le pregunte a una
mujer que pasa donde quedaba la estación en japonés, por suerte me entendió y
allí fui. Empezó a diluviar, para esto
yo ya estaba todo mojado y transpirado por los 10 kilómetros que
anteriormente había pedaleado.
Llegué, pasé la tarjeta y subí a la plataforma. Justo,
pero justo, el tren que yo tenía que tomar se estaba yendo. Oficialmente, no
era mi día. Tuve que esperan 30 minutos más. Creo que espere más que lo que
normalmente espero al 543 en Mar del Plata para ir al Illia. Ya estaba bastante
frustrado y me sentía un boludo importante por todo lo que me había pasado.
Igual, también me reía por todo lo acontecido.
Me subí al tren, que estaba repleto de estudiantes de
mi colegio. Eso por lo menos me hizo sentir bien, al menos me estaba tomando el
tren correcto! Cuando llegué la clase estaba a punto de comenzar. Otra vez
tuvieron exámenes, y otra vez me tuve que exiliar.
Fui a almorzar con ellos y realmente me ayudaron. La
cafetería es totalmente diferente al buffet de Fer, pero como me fueron guiando
no hubo problemas. Si bien hablan todo el tiempo en japonés, intento sonreir
onda de no parecer muy ortiva (quienes me conocen en Argentina saben que sí,
soy un tanto aburrido a veces)
Así es la vida por aquí. Solo espero poder volver sin
mayores dificultades a casa.
Algunas notas de autor:
1) Se viene un tifón hacia Japón. No se preocupen, la
zona es segura, solo que va a llover muchísimo (tal vez mañana no tengamos
clases) Sí., los sábados tenemos clase como un día normal. No puedo pensar en
eso mucho, no es alegre pensar que los sábados también me tengo que levantar a
las 6 AM. Es decir, no lo puedo pensar, no me entra en la cabeza ponerme el
uniforme un sábado para ir al colegio.
2) Mientras ellos tienen examenes, yo estoy en una
sala de estudiantes extranjeros (aunque por ahora soy el unico). El hecho de
estar con camisa, pantalón y rodeado de
libros, anuarios y computadoras me hace sentir un oficinista de 30 años.
3) La entrada parece un poco deprimente, pero no. La
estoy pasando super bien. Lo que pasa es que a veces me equivoco y generó un
poco de caos. Ya subiré cosas muy positivas que tengo para contar! Tengo muy
pegada esta canción:
No sé si es bueno o malo, pero no me la puedo sacar de
la cabeza. Desde que estoy en Japón se me pegaron los temas más diferentes,
desde Madonna (Dont cry for me Argentina) a Tan Biónica. Un horror mi gusto
musical.