Antes que nada, hola! A todos los que me escriben, gracias! Me hace muy feliz recibir mails, mensajes privados, comentarios y cualquier otra muestra de cariño. Últimamente tengo pocas ganas/tiempo de escribir, pero prometo ponerme al día pronto con las respuestas.
Soy un estudiante de intercambio.
Cómo vas a saber lo que es un sueño si nunca cumpliste uno.
Cómo vas a saber lo que es una aventura si nunca formaste parte de una.
Cómo vas a saber lo que es la angustia, si nunca le dijiste adiós a tus amigos y a tu familia con lagrimas en los ojos.
Cómo vas a saber lo que es estar desesperado, si nunca llegaste a un lugar estando solo, sin entender el idioma ni ningun cartel. (No mamá, eso ya no me pasa tan a menudo, quedate tranquila!)
Cómo vas a entender lo que es la diversidad, si nunca conviviste bajo el mismo techo con gente de otros países.
Cómo vas a entender lo que es la tolerancia, cuando tuviste que acostumbrarte a algo que ni siquiera te gustaba.
Cómo vas a entender lo que es estar sin esperanzas, si nunca quisiste abrazar a alguien que estaba a más de 14.000 kilómetros de distancia (o ir a una fiesta de egresados, por ejemplo)
Cómo vas a entender lo que es el patriotismo, si nunca dijiste “amo a mi país” abrazando a tu bandera.
Cómo vas a entender lo que es el orgullo, si nunca te diste cuenta cuanto habías avanzado.
Cómo vas a entender lo importante que son tus familia y amigos, si aún a 14000 kilómetros te siguen haciendo el aguante cada vez que caes.
Cómo vas a entender lo que es la imaginación, si nunca pensaste como va a ser el momento en el que volvieras.
CÓMO VAS A SABER LO QUE ES EL MUNDO, SI NUNCA FUISTE ESTUDIANTE DE INTERCAMBIO.
Hace poco este texto lleno mi inicio en Facebook (muchos estudiantes de intercambio) pero es totalmente real. Estos días donde quisiera volver a Argentina por unos días para estar en la fiesta de Egresados y en la colación, me siento así. Pero también feliz por estar acá, por vivir todo esto, por tener memorias que nunca voy a olvidar (como entregar en blanco un examen por primera vez en la vida), por cometer mil errores, por chocarme mil veces contra la pared y aún así seguir!
El otoño es muy lindo en Japón. Si bien hace frio, las hojas de los arboles tienen múltiples colores, hay muchas hojas por el camino y es vivible. Mirar las montañas así es genial:
Hoy fuimos a un onsen con unos voluntarios de AFS. Qué es eso? Bueno, en terminos generales: es un spa con aguas “termales” pero donde se dividen por sexo y se desnudan totalmente en público. Al japonés eso le parece lo más natural del mundo y nada extraño. A mi normalmente, los vestuarios y las piletas me molestan…principalmente las charlas de vestuario (existe acaso algo más insulso y superficial?) Pero de todas formas, fui, mis preconceptos no me van a vencer!
Fue bastante bueno. Muy relajante, bañarte mirando las montañas al aire libre es hermoso, mucho silencio, paz! Sigue siendo extraño la parte de la desnudez, pero para los japoneses eso no es una cuestión importante, casi intrascendente.
Por otro lado, necesito su ayuda! En dos semanas vienen unos estudiantes asiáticos por una semana a mi zona, y tenemos que preparar un show de talentos. Decidimos que íbamos a cantar canciones de nuestros países. Les parece muy mal que canté Gilda? No sé, me pareció gracioso. Pero me voy a morir de vergüenza!
Pues bien, falta menos de un mes para navidad, no es increible eso? Hace unos días, una amiga me decía “vi un especial de pan dulces en Utilísima, listo, se me fue el año”. Parece ayer cuando trabajaba en el verano! Pero bueno, así es la vida, llegamos al adviento (los cuatro domingos anteriores a la navidad)
Admito que el adviento es mi tiempo favorito durante el año, religiosa y profanamente (?). Es decir, siempre es lindo porque estoy de vacaciones, hace calor, la gente es más simpática, la navidad está a la vuelta de la esquina. No sé, siempre me gusta el adviento.
Pero acá en Japón, no hay nada de eso. Si bien las tiendas están decoradas con motivos navideños desde el 1 de Noviembre (post halloween), hace un frio tremendo, no estoy de vacaciones y encima tengo una semana de exámenes (incluyendo uno muy importante de japonés) y a nadie parece importarle mucho la navidad (excepto a las grandes corporaciones, claro)
Pero bueno, no importa. Hace unos años, el sacerdote de nuestra parroquia siempre nos proponía que nos pongamos una meta para adviento. Este adviento mi meta es que no pase un solo día sin reirme mucho, sin ser yo mismo (aunque me cueste muchas miradas sorprendidas), sin equivocarme y sin disfrutar estar en Japón. Rutina, no me vas a vencer.
No hay notas graciosas hoy, fue una semana un poco aburrida, aunque tuve tres feriados en una sola semana. No hubo nada importante, o nada de lo que me acuerde ya. En caso contrario, les avisaré pronto. Pero eso sí, DICIEMBRE ES MI MES!
See you soon (69 días to go home!)
Leandro